El estudio fue realizado a trabajadores y especialistas en RRHH, donde participaron 21.964 personas: 7927 de Ecuador, 3.158 de Argentina, 3.754 de Chile, 2.622 de Panamá y 4.503 de Perú.

La investigación explora cómo se incorpora el uso de la Inteligencia Artificial a las tareas diarias de los talentos en general y de profesionales de Recursos Humanos en particular, busca conocer cuáles son sus desafíos y sus beneficios.


Según el nuevo estudio regional de Multitrabajos, portal líder de empleo de Latinoamérica, denominado IA en el trabajo ¿qué tan útil es?, en el país el 36% de ecuatorianos usa la Inteligencia Artificial en sus tareas diarias, así también, el 56% consideran que esta implementación es útil y un 91% respondieron que en un futuro el uso de la IA va a ser más común en las tareas laborales.

¿Qué pasa con la utilización de IA en otros países de la región? Usan IA en el trabajo el 36% de las personas trabajadoras de Chile; el 32% de Panamá y el 31% de Argentina. Por otra parte, Perú califica como el país que más utiliza IA en el trabajo con el 49%.


IA en el trabajo ¿qué tan útil es? Es un estudio regional de Multitrabajos realizado a personas trabajadoras y especialistas en RRHH. En el estudio participaron 21.964 personas: 7.927 de Ecuador, 3.158 de Argentina, 3.754 de Chile, 2.622 de Panamá y 4.503 de Perú. La investigación explora cómo se incorpora el uso de la Inteligencia Artificial a las tareas diarias de los talentos en general y de profesionales de Recursos Humanos en particular, cuáles son sus desafíos y cuáles sus beneficios.

¿De qué forma incorporan los talentos ecuatorianos la Inteligencia Artificial en sus tareas? El 36% para automatizar tareas repetitivas, otro 36% para hacer consultas ante inquietudes diarias; el 28% para mejorar la interacción con entornos digitales; y el 27% para resolver problemas cotidianos.

A pesar de que solo el 36% de los encuestados en Ecuador hizo uso de la IA en su trabajo, para el 56% es útil la incorporación en sus tareas diarias. La tendencia se repite en el resto de los países de la región.

La frecuencia con la que utilizan los ecuatorianos la inteligencia artificial en sus labores es un 33% casi todos los días; un 29 % una vez por semana; un 27% diariamente y un 11% una vez por mes.

Quienes manifestaron no incorporar IA en el trabajo, expresaron que no lo hicieron porque: en sus organizaciones no se los permiten (35%); les gusta hacer sus trabajos sin la incorporación de Inteligencia Artificial (28%); no logran acostumbrarse (17%); porque no consideran que sea necesario (16%) y el (9%) porque no se llevan bien con la tecnología.

En lo que respecta a los beneficios de utilizar IA en el trabajo, el 45% considera que se ahorra tiempo; el 37% que agilizan las tareas; el 31% que se automatiza tareas repetitivas; y que se puede acceder a la información rápidamente; un 27% que brinda mayor eficiencia; un 26% que optimiza procesos; un 19 % que se puede analizar datos complejos y que reduce errores humanos; un 15% que potencia la innovación de los contenidos; un 14% que disminuye gastos operativos; un 13% que personaliza servicios; un 8% que realiza cosas que los humanos no pueden y que distingue frente a la competencia.

¿Qué pasa con los desafíos? El 35% considera como principal desafío que los talentos no pierdan su empleo; el 30% el no depender 100% de la IA; el 24% la seguridad de los datos; el 23% el tener los recursos necesarios para la implementación de IA; el 21% el mantener el criterio humano al momento de realizar tareas; el 16% que los talentos no se vuelvan autómatas; el 14% que los equipos entiendan y sepan cómo usar la IA; el 13% la pérdida de la productividad laboral por utilizar la IA; otro 13% limitaciones a la creatividad humana; un 12% la integración a los sistemas y procesos existentes; un 10% la necesidad de que los datos sean exactos y no seas sesgados para que la IA funcione bien; un 9% la resistencia al cambio por parte de los talentos y organizaciones; un 7% que los talentos no puedan acostumbrarse.

Y, ¿cuáles son las desventajas de usar Inteligencia Artificial en las tareas laborales? La pérdida de puestos laborales (42%); dependencia respecto a la IA (35%); la falta de empatía, comprensión e intuición humana (26%); errores por falta de información (25%); interacción limitada (19%); dificultad en la toma de decisiones éticas (17%); los costos de la implementación y mantenimiento de la IA (16%); Despersonalización de la atención a clientes (13%); sesgos algorítmicos que pueden llevar a decisiones discriminatorias o injustas (10%).

Cuando se les consulta sobre el futuro de la IA, el 91% responde que cree que será más común su uso en las tareas del trabajo. Ante el interrogante de si la Inteligencia Artificial va a reemplazar el trabajo humano, el 52% lo considera así.

El 44% de los especialistas en Recursos Humanos utiliza IA para armar los avisos de búsquedas

El 54% de los expertos en RRHH consideran que sí es útil el uso de IA, por otra parte, el 38% cree que el uso de la Inteligencia Artificial es útil, pero dependiendo para que se la use y finalmente un 8% considera que no es útil. Esto significa, que un 92% tiene una percepción positiva de su utilidad.

Si bien la mayoría de los profesionales en Recursos Humanos considera que es útil la Inteligencia Artificial, por el momento, únicamente el 43% la utiliza en el proceso de reclutamiento o selección de talentos. Una tendencia similar se repite en el resto de la región: en Perú el 44%; en Chile el 35%; En Argentina el 31% y en Panamá el 27%.


Entre las principales actividades para las cuales los especialistas en Recursos Humanos utilizan IA, se encuentran: el armado de los avisos de búsquedas (44%); para optimizar la búsqueda de candidatos (40%); para analizar los currículums o perfiles (36%); para planificar la entrevista de los candidatos (30%); para armar un análisis de los candidatos (28%); para seleccionar a los candidatos (19%).

En Ecuador el 94% de los profesionales en Recursos Humanos cree que el uso de IA será más común en el futuro. La tendencia se repite en el resto de la región: en Perú y Chile, el 95% lo considera así; ; en Argentina y Panamá el 93%.